Evolución de la cerrajería
En la antigüedad, las personas que forjaban llaves, espadas, cerraduras y herramientas eran los herreros. Este tipo de trabajos no era muy difícil, un poco rudimentario y tampoco necesitaba demasiada especialización.
Las primeras llaves y cerraduras estaban hechas para las puertas de castillos y cofres muy grandes que guardaban oro, el cual era el elemento más valioso en ese tiempo. Estos se hacían con materiales y aleaciones de diferentes metales para confirmar su calidad, dureza y durabilidad.
Luego, en el momento que vino la revolución francesa, este tipo de procedimientos se empezó a reducir, y la herrería se vino abajo. La herrería, al no ser necesitada tanto como la cerrajería pasó a un segundo plano. La cerrajería no es un producto per se, por lo que esta se vino a convertir en un oficio propio, en vez de tener dependencia sobre otro, en este caso la herrería.
Los cerrajeros del presente y del pasado son muy diferentes. Las habilidades que tienen los de la actualidad no se comparan con los del pasado, además de que la tecnología que se usa hoy en día representa una de las mejores y más grandes diferencias que presentan.
Hoy, los cerrajeros se encuentran capacitados en diferentes especializaciones, y además de esto han adquirido habilidades que permiten ofrecer soluciones en cuanto a problemas de cerrajería (con alto nivel de seguridad) se presenten de una manera económica, que se ajuste al bolsillo del usuario común.
Los mecanismos de seguridad, altamente avanzados, son especiales y específicos para los cerrajeros y su habilidad para instalarlos en las empresas o negocios que los necesiten.
El servicio de la cerrajería generalmente está enfocado en prestar servicios para cuando ocurra una emergencia. Uno de estos puede ser cuando se pierde o se olvida dónde está una llave, cuando la dejamos dentro de nuestro automóvil, entre otras emergencias en las que necesitan de un cerrajero rápido y que tenga disponibilidad inmediata para esto.
Además, demás está saber que los que llamamos cerrajeros profesionales pueden utilizar sus habilidades para proyectos que tenga una empresa con distintos niveles de complejidad.
La tecnología, también ha hecho que los cerrajeros se tengan que mantener actualizados con respecto a las habilidades que tienen. Estos no son simples artesanos, tienen que aprender a realizar diversas tareas mecánicas y además tener conocimiento en cuando a electrónica y computación para poder ofrecer los mejores servicios que puedan, como por ejemplo, cuando se necesita la apertura de una caja fuerte o una puerta blindada.
El cerrajero es uno de los profesionales que tiene más conocimientos actualmente. Siempre necesita estar acorde con las nuevas tecnologías que se están desarrollando. Además de esto, su servicio también subirá de nivel de acuerdo a los conocimientos que se tengan.
Siempre podemos acudir a ellos cuando tengamos un problema de seguridad o que necesitamos consejos. Un cerrajero no nace aprendido, sus conocimientos se van desarrollando a medida de que su experiencia y experticia crecen. Esto demuestra lo confiables que son, y que podemos contar con ellos cuando más los necesitemos.